Saturday, March 04, 2006

Incluso se puede apreciar en uno de estos vasos un enredo que parece que tiene mangas, ahora sí como el huipil de doña Marina; pero el detalle de que deja una parte de la espalda descubierta lo vuelve por completo diferente. La ropa de Doña Marina con trabajo nos deja ver sólo su rostro y sus manos.

Conviene recordar también que la indumentaria de Doña Marina consiste en huipil y enredo o falda larga, y que estos enredos o delantales de las mujeres mayas no cuentan, ojo, con el complemento del huipil. Lo que me hace pensar que, si bien son muy parecidos, lo que usa doña Marina en realidad es otro tipo de indumentaria. Un huipil siempre muy diferente.

En las figurillas de cerámica se puede confirmar lo encontrado en los códices: quechquémitl con enredo, quechquémitl con falda, huipil corto con enredo, con puro enredo, y con la pura falda también las hay. Pero nada que sea exactamente como el huipil de Doña Marina, que, según las crónicas, tenía que vestir como una mujer maya de Tabasco. Aunque, ya entonces, bien vale la pena recordar que ella era una esclava entre los mayas, lo que vuelve un poco más difícil tratar de imaginar cuál fuera su indumentaria prehispánica.